Lo que a veces sucede, y no nos damos cuenta, es que otra persona
está durmiendo mal a causa de nuestra actitud y que nosotros tenemos
la clave para hacer que esa persona consiga dormir bien.
Cuando tu madre te dice que llevaba mucho tiempo sin dormir bien y
que ahora está durmiendo como una “niña-feliz”, por lo que tu
has hecho, sabes que has vuelto al sendero CORRECTO.
Queda mucho por andar. Pero este es el sendero, del cual yo un día
me desvié.
Rezo porque tú estés en tu sendero correcto. Rezo porque duermas
bien.
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